Fines
- Reclamar y exigir dignidad y justicia ante la situación en la que se encuentra el Real Monasterio de Sijena, declarado Monumento Nacional en 1923.
- Defender y difundir la verdad histórica sobre el expolio sufrido por el Real Monasterio de Sijena.
- Trabajar para que sean devueltos al Real Monasterio de Sijena los bienes expoliados, depositados o irregularmente vendidos (objetos y obras de arte, incluyendo las pinturas murales de la Sala Capitular) y que se encuentran hoy en día almacenados o expuestos en el Museo Diocesano de Lérida, en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) de Barcelona y en cualquier otro lugar del mundo.
- Apoyar las acciones legales en marcha y exigir que se cumplan íntegramente las sentencias judiciales que obligan a la Generalitat de Cataluña a devolver los bienes, así como promover acciones legales adicionales para la consecución de estos fines.
- Organizar, involucrando a la sociedad civil aragonesa, acciones políticas y sociales para dar a conocer y denunciar en el resto de España y ante la Comunidad Internacional la situación de Sijena.
- Promover el nuevo Museo del Real Monasterio de Sijena y procurar que la atención a los visitantes sea la más adecuada posible.
- Cooperar con la comunidad religiosa del Real Monasterio de Sijena, para que las personas que lo visitan puedan también conocer y apreciar, si así lo desean, la riqueza espiritual que alberga.
- Potenciar todo tipo de iniciativas culturales y turísticas en torno a Sijena.
- Conseguir que el año 2023, centenario de la proclamación del Real Monasterio de Sijena como Monumento Nacional, se celebre internacionalmente el «Año de Sijena».
- Fomentar la creación de una red de panteones reales de la Corona de Aragón donde Sijena ocupe el lugar que le corresponde en la historia, junto a San Juan de la Peña, San Pedro el Viejo y Poblet.
- Trabajar por el retorno de los bienes de las parroquias aragonesas de la Diócesis de Barbastro-Monzón que también retiene el Museo de Lérida, fomentando la colaboración ciudadana para exigir el cumplimiento de las sentencias de los tribunales eclesiásticos y para cualquier otra acción que se vea necesaria.
- Buscar la cooperación y el apoyo mutuo con otras reivindicaciones patrimoniales de Aragón.